Como decía es un juego, de dados, casillas y pasta, muy
entretenido. Estuve observándome durante un buen rato y viendo las emociones
que me generaba jugar. Me preguntaba si con el dinero de verdad hacemos lo
mismo.
El Monopoly es muy famoso y casi todo el mundo ha jugado
alguna vez. Desde mi punto de vista, creo que la vida real jugamos en un gran
Monopoly.
Trabajamos, ganamos dinero, lo gastamos, pagamos impuestos,
compramos casas, las vendemos después. Todo me recuerda a este juego.
Mientras jugamos al “Gran Monopoly” la vida se nos pasa sin
apenas haberla vivido. Sólo nos tiene entretenidos cincuenta, sesenta, setenta
y ahora los ochenta años.
Últimamente, viendo los telediarios de un día cualquiera,
podemos comprobar como el Gran Monopoly está funcionando. Los países en crisis,
el banco central presta pasta, unos países ponen condiciones, otros ceden. Me
pregunto si todo este juego no está orquestado para mantenernos entretenidos y
así hacer lo que quieran con nosotros.
La sociedad de consumo o capitalismo es una buena muestra de
ello. Tratan de generar necesidades en nosotros para que trabajemos más y
seamos más dependientes de ellos. Digamos que nos tienen entretenidos,
ocupados.
Pero esto no es lo peor. Lo malo es que nosotros mismos
queremos que el sistema no se rompa ya que entonces que hacemos.
Desde mi punto de vista, tendríamos que dejar que el sistema
que los políticos y los que se consideran poderosos han generado se rompiese y
viésemos que sucedería. Tal vez nos sorprenderíamos de lo que pasase a
continuación. Tal vez las cosas no fuesen tan graves ni la vida cambiase tanto.
Hace poco vi un párrafo en el facebook de la película Matrix
que me gustó y viene a colación con esto que estoy escribiendo hoy y sobre el
Gran Monopoly o Gran Monopolio.
El párrafo es cuando Morfeo dice a Neo:
“Tienes que comprender que la mayor parte de los humanos son
todavía parte del sistema. Tienes que comprender que la mayoría de la gente no
está preparada para ser desconectada. Y muchos de ellos son tan inertes, tan
desesperadamente dependientes del sistema, que lucharan para protegerlo”.
Mirar a vuestro alrededor y ver si esto es cierto. Para mí
es totalmente valido.
Hasta que no seamos conscientes que estamos dentro de un
gran sistema creado para hacernos borregos y totalmente dependientes de los
poderosos no comenzaremos a cambiar el mundo.
Con esto no quiero decir que no entremos a jugar en el Gran
Monopoly. Sólo que siendo conscientes de ello jugaremos cuando nos apetezca o
nos interese. Entonces es cuando seremos verdaderamente libres.
¿La partida? Ni que decir tiene que la perdí. ¿Qué otra cosa
podría haberme sucedido cuando me salía del juego cuando me apetecía?
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